Contacto en La Paz

Policiales :::: Miriam Montes, suegra de Francis Allison, es pieza clave del caso Crousillat.

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José Enrique Crousillat (78) recibió a 7 personas en su departamento durante los cinco meses que permaneció escondido. Entre ellas figuran su abogado Jorge Castro y Miriam Montes.

En los extenuantes meses de vigilancia al departamento de la av. La Paz 1459, en Miraflores, guarida de José Enrique Crousillat por más de cinco meses (CARETAS 2163), una mujer llamó la atención de la Policía.

Los detectives del Equipo Especial de Inteligencia (EEI) de la Dirincri la vieron por primera vez los primeros días de setiembre del año pasado.

La mujer se encontró en la avenida Pardo, en Miraflores, con la cubana Alina María Ramos (42), esposa de José Enrique Crousillat, quien había llegado a Lima, procedente de Buenos Aires, Argentina, el 2 de setiembre.

La Policía no supo de quién se trataba hasta que ambas enrumbaron a un edificio de la cuadra 6 de la avenida Benavides. Fue entonces cuando descubrieron que era Miriam Montes Baca (57), madre de Carla Robbiano, esposa del reelecto alcalde de Magdalena, Francis Allison.

Alina Ramos de Crousillat y Miriam Montes fueron vistas juntas en numerosas ocasiones y, según la Policía, la suegra de Allison visitó el edificio de La Paz en 4 oportunidades: el 10, 13, 18 y 22 de setiembre.

La cubana partió a Buenos Aires el 24 de setiembre, pero los contactos con la suegra de Allison continuaron. Según la Policía Federal de Argentina, entre octubre y diciembre del año pasado, Alina Ramos se comunicó telefónicamente con seis personas desde los tres teléfonos fijos de su casa en la calle Vicente López y Planes 1084, en Buenos Aires. Ellos son: el argentino Rubén César Ávila, Gino Vera-Tudela (gerente de Edén Producciones S.A.), Martin Fritz Meyer, Aldo Asencios Beltrán (apoderado de Edén), Jorge Castro Castro (abogado de Crousillat) y Miriam Montes.

De acuerdo a las investigaciones de los sabuesos de la Dirincri, los primeros cuatro participaron plenamente de la operación para ocultar a Crousillat y planear su fuga, pero se desconoce el papel de Montes.


CUENTAS CLARAS
La suegra de Allison trabaja en una productora de televisión y probablemente su amistad con Alina Ramos de Crousillat tiene origen en dicha actividad. Un oficial de la Dirincri dijo a CARETAS que se investiga si Miriam Montes “colaboró económicamente” con Crousillat, pero la hipótesis no tiene mucho asidero. Crousillat tiene cuentas bancarias en Argentina y, al parecer, posee el dinero suficiente como para alquilar una avioneta, como la que lo trajo de Bolivia al Perú en julio pasado.

Por otro lado, Montes parece haber empezado el año con mal pie. El martes 11, su departamento de Benavides se incendió por un cortocircuito y tuvo que mudarse a Surquillo. El incidente la hizo perder 8 kilos.

El lunes 17, un reportero de CARETAS llamó a la casa de Montes, pero una empleada dijo que “la señora está grabando”. Luego un familiar suyo alegó que había viajado fuera del país. La jueza Deysi Uriol, del Segundo Juzgado Anticorrupción, investiga su papel en la fuga de Crousillat.


DÍAS CLAVES
Mientras tanto, el broadcaster de 78 años continúa recluido en el pabellón de prevención del penal de máxima seguridad Miguel Castro Castro.

La próxima semana, el Tribunal Constitucional (TC) se pronunciará respecto al hábeas corpus interpuesto por su abogado Jorge Castro, que busca se declare ilegal la revocatoria del indulto presidencial a su cliente.

El jurista Javier Valle Riestra opinó a RPP Noticias que el “hábeas corpus es pertinente y en consecuencia debe respetarse el indulto que se promulgó hace un año, porque se trata de una figura de cosa juzgada”.

Valle Riestra sostuvo que si el TC falla a favor de Crousillat éste recobrará su libertad inmediatamente, pero podría ser procesado si se descubre que son falsos los dictámenes que concluyeron que el ex empresario televisivo padecía de una cardiopatía aguda e hipertensión.

El presidente del TC se encuentra en Colombia, pero retornará este jueves 20 para definir la controversia. El abogado Jorge Castro, quien sostiene aún que es falso que Crousillat haya estado escondido en Argentina, adelantó que si se declara infundado el hábeas corpus acudirá a “las instancias internacionales hasta obtener la libertad de mi patrocinado”. (Américo Zambrano)
Revista Caretas del 20-01-2011