domingo, 4 de septiembre de 2011

Cierran filas con Soberón, pese a críticas y pedidos de renuncia

Política | Dom. 04 sep '11 - Perú 21

Cierran filas con Soberón, pese a críticas y pedidos de renuncia

Vicepresidenta Marisol Espinoza lo defiende y asegura que “solo buscan destruir su imagen”. Cuestionado funcionario antidrogas niega haber asesorado “formalmente” a gremios cocaleros.
Pese a los pedidos de renuncia al cargo, por sus vínculos pro cocaleros con los gremios de ese sector y su cercanía con las demandas de estos, el Ejecutivo habría decidido cerrar filas en torno al presidente de Devida, Ricardo Soberón, ratificándolo en el cargo.

Fuentes del Gobierno señalaron a Perú.21 que el presidente Ollanta Humala –al igual que el primer ministro Salomón Lerner– no estarían dispuestos a ceder ante la oposición entregando la cabeza del funcionario antidrogas, a quien recientes documentos, audios y correos electrónicos dan cuenta de sus estrechos nexos con los cocaleros.

“Lo van a ratificar (a Soberón). No están dispuestos a pedirle que se vaya porque la política antidrogas lo maneja el Gobierno”, sostuvo el informante del Ejecutivo.
El respaldo del Gobierno coincidió, además, con la cerrada defensa que hizo ayer por la mañana con el titular de Devida, la primera vicepresidenta de la República, Marisol Espinoza.

Sin precisar si su apoyo era a título personal o a nombre del Ejecutivo, Espinoza afirmó que las críticas a Soberón “solo buscan destruir su imagen”, sin constatar qué tan efectivo son los planes de lucha contra el narcotráfico.

“Me hubiera gustado que esa preocupación, que muestran ahora, la hubieran dado a conocer en el pasado gobierno, y que se pregunten entonces por qué los programas de erradicación no dieron resultados y aumentaron los cultivos de coca”, señaló en una emisora estatal.

NADA FORMAL. Por su parte, Soberón también salió al frente para negar que haya asesorado “formalmente” a los gremios cocaleros, como la Confederación Nacional de Productores Agropecuarios de las Cuencas Cocaleras del Perú (Conpaccp), y menos que haya tenido una relación de dependencia con algún gremio.

Sin embargo, admitió que se ha reunido en diversas oportunidades con diversos dirigentes de la selva alta, no necesariamente cocaleros y que, en su condición de jefe del organismo antidrogas, “seguirá reuniéndose con los campesinos de esa región”.

Soberón reconoció, además, que el Gobierno está revisando la política de cooperación antinarcóticos con los Estados Unidos, a través de un procedimiento de enmienda, la cual se realiza todos los años.

Sobre el pedido del legislador Juan José Díaz (Fuerza 2011), el presidente de la Comisión de Fiscalización, Martín Belaunde, afirmó a este diario que su despacho evaluará la invitación a Soberón. “No es un tema materia directa de la comisión, pero sí de interés público debido a esos audios y correos sobre este señor”, anotó.

1 comentario:

ruben bravo dijo...

Si la política antidrogas de los regímenes anteriores han sido un fracazo, un nuevo planteamiento que ha sido visto de buen agrado, por gente conocedora de estos asuntos, no sé a qué se debe el cuestionamiento a muerto contra el nuevo jefe de DEVIDA, "razones" el haber mantenido diálogo con los cocaleros, el haberles dicho que la política de interdicción no daba resultados.Inclusive el Secretario General de la OEA ha manifestado el fracazo de la política antidrogas del anterior gobierno y que se requiere mayor participación de los EEUU, uno de los mayores consumidores de la
droga en el mundo.
Lo que pasa es que el estido de Ollanta los ha desubicado, están desilucionados el fracazo de los candidatos iluminados que no pudieron llegar al pueblo, porque sus discursos ya no convence a nadie, dónde están los ppkuys, los fujimontesinistas y adlateres. Ollanta no es socialista ni muchomenos marxistaleninista, ha dicho que es nacionalista, que quiere gobernar para el PERÚ Y CON EL PERÚ, sin intromisión depoderes extranjeros ni poderes nacionales, un gobierno para todos, un política de crecimiento y desarrollo, que atiende con prioridad a los olvidados de siempre.